El Dios que prohibió a Adán y a Eva comer los frutos del árbol de la ciencia quería, pues, que el hombre, privado de toda conciencia de sí mismo, fuera por siempre una bestia eterna, en cuatro patas ante Dios 'viviente', su creador y su amo.
Mijaíl Alexándrovich Bakunin
Bautizada católica, sí, esa es mi realidad y la de muchos de quienes a esta altura del partido ya no les interesa la religión ni mucho menos "dios". Fui una católica de pie a cabeza; iba a misa cada domingo desde muy pequeña, por lo menos hasta los 19 años (ahora tengo 22), estudié la biblia, hice cursos de filosofía cristiana en los veranos y en el invierno, fui monitora de infancia misionera y a.c.n. (asociación de catequista niños), formé una comunidad cristiana con los que hasta el día de hoy son mis mejores amigos, algunos de ellos mis hermanos, les regalé mi fe y mis fin de semanas (y a veces mi tiempo después del colegio o trabajo) a una gran cantidad de personas que dejaron mucho en mí, hasta que con el pasar de los años, junto con un montón de injusticias y mentiras que observé en la religión que me regaló los que creo los mejores años de mi vida, más la suma de algunas insatisfacciones personales por algunos rollos morales entre otras cosas, renuncié y negué todo tipo de creencia. ¿El proceso fue así no más? no lo crea. Pasaron muchas cosas para llegar a eso. Ha sido uno de los procesos de cambio más fuertes en mi vida. Las incoherencias históricas, la manipulación de la biblia (de su escritura e interpretación), las injusticias desde el vaticano a las comunidades de base de cada barrio, el 1% que de su total se van 3/4 a vaticano (y quién sepa qué es lo que hace el vaticano con esa plata), la manera de conservar una tradición que ni la mitad de la gente que va a misa entiende, pero que no importa que se pare o hable cuando tiene que hablar en la eucaristía, lo que vale es que diga que es creyente, sin tener conciencia de lo que dice o no en cada rezo y en cada ritual, los sacerdotes pedófilos y un celibato sin sentido, todo eso y "dios" en medio de esto, me parece una asquerosidad y una burla para el ser humano. Cada injusticia, desigualdad y maldad en el mundo, me demuestra que no existe un dios, sino que lo único que existe es la fe por creer que algo te puede salvar de la mierda. Es increíble ver como la gente (y yo en su momento) perdió la fe en sí misma, en como ignora y niega su fuerza y su capacidad de hacer de esto algo mejor sin la necesidad de un ser superior. Hoy es "viernes santo" y la gente está loca comprando pescado y mariscos, creyendo que por tener respeto con el hijo de dios, que ni siquiera le consta que existió, al no comer carne, podrá ganarse el cielo y le perdonarán sus pecados. Pero lo único que creo cierto, es que la gente perdió respeto por sí misma, dejando que el empresariado le robe en un momento que para los creyentes debería ser de reflexión y no de compras pensando en lo que voy a comer o no. La religión y dios no es más que un negocio de algunos pocos. El domingo llegan los huevitos de pascua! y pronto viene la navidad! todo cada vez más cerca, y vamos gastando y endeudándonos, creándonos necesidades para compartir con la familia, sin darse cuenta que los mejores momentos con ellos y los amigos, son los momentos más simples e inesperados. Que un buen gesto puede hacerse cualquier día, con cualquier abrazo, con un presente cualquiera, ojalá el más simple. Que puedo estar contigo cuando tienes penas y que eso para tí y para mí tiene que valer más que cualquier regalo de navidad y que no tengo que hacerlo por un cristo ni por querer ganarme el cielo. Siempre he pensado en la gente que va a misa y cree en todas las mentiras es porque teme en lo que pasará con su alma. Sinceramente, yo nunca, incluso cuando fui católica, me sentí invadida por ese tipo de temor y siempre que hice una buena acción o le regalé de mi tiempo a alguien en nombre de dios, jamás lo hice pensando en el cielo y lo genial que sería eso. La religión si bien me hizo hacer muchas cosas buenas en mi vida (cosas que llevo conmigo hasta el día de hoy), también vi como le hizo mierda la vida a otras personas. Las llenó de culpas e intereses. Vi cómo se derrumbaron matrimonios por culpa de la moral católica, cómo bautizos se volvían en peleas familiares porque las cosas no salían como querían en la celebración y cómo alguna vez le negaron la posibilidad de ser feliz dentro de la comunidad católica a un sacerdote que aprecio mucho y que decidió que su vocación no era la de ser sacerdote, sino la de formar una familia con la mujer que amaba. Realmente la manera en que lo expulsaron fue desastrosa e indigna para un hombre que habló con la verdad y que tenía todo el derecho del mundo a querer cambiar el camino en su vida. Si es que dios existe, que le tiré un palo en la cabeza a todo estos pelafustanes que no hacen más que lucrar y hacer infelices a la gente en su nombre. Debemos saber que somos nuestra única salvación, porque ninguna fuerza divina nos salvará de esta gente. Porque como seres humanos, siempre hemos tenido todo en nuestras manos. Porque no necesitamos la biblia ni un dios para ayudarnos y hacer el bien entre nosotros. Porque nadie nos puede decir ni que comer ni donde comprar. Porque no necesito de una fecha en especial para analizar y reflexionar sobre lo que hago bien o mal con mi vida y porque no tengo que amar a todo el prójimo, sobre todo si se trata de unos cuantos pocos que nos quieren cagar a mí y a mi gente. No necesitamos de un dios ni de una religión para todo esto.
Semana de reflexión? reflexione sobre la gran mentira y sobre el poder que tiene en sus manos de hacer de esto algo mejor...
