Tuesday 1 May 2012

Día del obrero

Y así empieza a terminar el día del obrero, con algunos disturbios, periodistas ignorantes diciendo que es el día del trabajo y no "del trabajador" (si fuese el día del trabajo, estaríamos todos trabajando), pacos mal heridos, algunos presos y, después de las 6 de la tarde poco y nada se recordará de las demandas del pueblo y quizás para ganar votos para las próximas elecciones municipales alguien ofrecerá en las noticias de las 21:00 hrs subir en 5 ó 10 lucas el sueldo mínimo. Me pregunto ¿pasará lo mismo en otros países? este día no pasa nada trascendental para el obrero en $hilito, más que unas horas menos de trabajo para los explotados, donde pueden dormir más de lo que duermen habitualmente o algunas horas de tiempo libre o para que las mamás trabajadoras compartan algo de su tiempo con sus niños. Y es que ya casi nadie va a marchar y es lógico; el Transantiago, las largas jornadas de trabajo, las tareas de los niños, el mismo sistema, tiene inmersos en el cansancio al obrero que ahora ya no lleva tierra en su ropa sino lindos tacos y corbatas, y claro, tan lindos se ven que ya no ven ni siquiera en sus cuerpos las demandas de sus ascendencia, ya no sienten ni siquiera propias las demandas de quienes están luchando hoy en las calles de Chile. El empresariado ha disfrazado al obrero, le ha puesto micros que por fuera lucen relativamente lindas, le puso colores al transporte público en las comunas más vulnerables a la pobreza, nos han dado promesas en las noticias, alguno que otro festival con lindos artistas y lindas canciones y todos vamos olvidando lo cagados que estamos. En mi casa, mi tío hace un asado, como si hubiese algo que celebrar, y no lo culpo, se lo merece por ser trabajador y sacarse la cresta día a día por tener algo de plata para levantar a su familia, es la realidad de muchos hogares. Pero no seamos tontos, como me decía mi mamá mientras cocinaba, todos deberíamos estar en las calles, por sobre todo los estudiantes que estudiamos para ser presos del sistema, para ser los obreros de alguien (menos los ingenieros de la PUC o la Universidad de Los Andes). Mi mamá me preguntó "¿no vas a la marcha?" mirándome con culpa, y yo le respondí que no tengo con quién ir (y no es por flojera) que hay que ir en grupo a esas cosas, los pacos son muy malditos como para andar sola. Cuánta razón tiene mi mamá, deberíamos estar todos en las calles, ellos nunca serán más. ¿Cuándo estaremos todos en las calles? obreros y estudiantes deberíamos haber estado ahí. Sin duda el empresariado, la derecha, el capitalismo y la televisión, nos han tendido la trampa más grande de todas. Disfrazaron al obrero, disfrazaron sus demandas, disfrazaron con tarjetas de crédito la miseria y mientras la larga jornada laboral, las escuelas-cárceles, el largo trayecto del Transantiago y el mall los fin de semanas disfracen esta miseria, el neo-obrero (así le puse ahora al obrero que ya no lleva trapos sucios, sino tacos y corbata, además ignoro si alguien ya le puso un nombre a este obrero del siglo XXI) no sentirá propias las demandas que viene arrastrando su clase social por tantos años. A menos de que se sienta afectado por el sistema y descubra que su miseria la cubre con tarjetas de crédito nunca saldrá a la calle a dar su grito y se quedará en su casa haciendo un asado el Primero de Mayo. Esto me recuerda a la Pedagogía del Oprimido de Paulo Freire que dice que mientras el "oprimido" en vez de admirar a su patrón y querer ser explotador como él, se dé cuenta de que es un "oprimido" y de que tiene un "opresor" no se verá como motor de cambio social ni menos habrá un cambio en el corto plazo en cuánto a las demandas laborales que asfixian hoy a Chile y el mundo. El obrero hoy en Chile se siente un "igual" con su patrón; goza de internet, agua caliente, ropa Lacoste y salud gracias al endeudamiento. La tarjeta de crédito ha hecho que hoy sean cada vez menos en las calles y que no quede más que un recuerdo las demandas que salieron a pedir nuestra clase obrera en este día del trabajador hace muchos años atrás. Y como dije al principio. hoy se aprovechará algún político de decirnos que se viene el aumento de 5 ó 10 lucas al sueldo mínimo, que habrán más oportunidades para la clase media (clase inventada por el capitalismo, para mí y unos cuantos más la clase media es lo mismo que un pobre en comparación con los grandes empresarios que son dueños de Chile) y bueno, Chile sigue mañana trabajando y estudiando como si nada hubiese pasado, con un mal recuerdo de los deudores habitacionales en el Mapocho y uno que otro paco desclazado herido (los pacos). Después de las noticias de las 21:00 hrs. ya no queda nada del "viva Chile, viva el pueblo, vivan los trabajadores", eso también es un mal recuerdo de cuando la gente en Chile era pobre y tenía que hacer filas para poder comer algo...